Cada vez más personas, especialmente millennials, buscan retirarse temprano adoptando la filosofía FIRE. ¿De qué se trata este movimiento? ¿Es realmente viable o se trata de un mito? Vayamos por partes para entenderlo bien.
Origen e ideas básicas de FIRE
El movimiento FIRE (acrónimo en inglés de Financial Independence, Retire Early) surgió en los años 90 en Estados Unidos. La premisa es simple: ahorrar e invertir agresivamente gran parte de tus ingresos, para poder vivir de las rentas en poco tiempo y así retirarte joven.
Quienes siguen esta filosofía buscan maximizar sus ahorros llevando un estilo de vida austero y reduciendo gastos al mínimo. De esta forma, en teoría podrían jubilarse incluso antes de los 40 o 50 años, edad considerada tradicional para dejar de trabajar.
Dentro de FIRE también existen variantes más extremas, como Lean FIRE. Estos buscan retirarse todavía más jóvenes, ahorrando más del 50% de sus ingresos. ¿Pero es esto realmente posible o viable? Analicemos pros y contras.
Los argumentos a favor de FIRE
Lo bueno de FIRE es que te hace repensar tu relación con el dinero, el consumo y el trabajo. Invita a preguntarnos: ¿cuánto dinero necesitamos realmente para ser felices? ¿Vale la pena sacrificar años de vida trabajando para jubilarnos más tarde con algo más de dinero?
Otros beneficios que destacan sus defensores:
- Permite alcanzar la ansiada libertad financiera para dedicar el tiempo a lo que uno quiera.
- Optimiza el ahorro llevando una vida sencilla y reduciendo gastos innecesarios.
- Genera ingresos pasivos que permiten cubrir tus gastos sin necesidad de trabajar.
Los cuestionamientos a la viabilidad de FIRE
Ahora bien, en la práctica FIRE presenta varios problemas y sus premisas están siendo cuestionadas:
- Con la inflación actual y la caída de los mercados, se hace difícil generar rentas estables para vivir indefinidamente.
- Muchos tuvieron que volver a trabajar al no poder sostener su estilo de vida solo con inversiones.
- Para cuando se juntan los ahorros necesarios, la vida ya está medio vivida. Es demasiado tarde para cambiar radicalmente de rumbo.
Otras críticas son:
- Sólo apunta a subsistir, no a vivir una vida plena.
- El dinero en sí mismo no puede comprar felicidad ni éxito.
- Importa más disfrutar el camino que sólo llegar a la meta de jubilarse.
Consejos prácticos: un equilibrio es posible
Más que verlo como un objetivo rígido, lo mejor es entender FIRE como una actitud sobre las finanzas y la vida. Nos invita a buscar un equilibrio, sin obsesionarnos ni sufrir en el proceso.
Algunas ideas prácticas para encontrar ese balance:
- Gasta menos de lo que ganas, pero sin privarte en exceso. Disfruta el proceso.
- Ahorra e invierte lo que puedas, pero con metas realistas. No te sobre-endeudes.
- Diversifica tus inversiones para minimizar riesgos de pérdidas grandes.
- Mantente flexible ante cambios en la economía. Está bien ajustar el rumbo.
- Valora los momentos y tu tiempo por sobre el dinero. La vida es hoy.
FIRE no es una receta mágica ni funciona para todos. Pero nos invita a reflexionar sobre nuestros verdaderos valores y objetivos en la vida, más allá del dinero.
Importa más enfocarnos cada día en hacer lo que amamos, rodeados de gente que queremos. Esa es la libertad y riqueza que realmente cuenta.