¿Sabes a lo que me refiero? A veces, mientras tragas o simplemente mientras conversas (como me pasó a mí en una ocasión, me quería morir porque estaba en una reunión importante), se desprende una especie de granito de arroz o piedrecita blanca o amarillenta de la garganta. Es fétida y no eres el único al que le pasa esto. Se llaman Tonsilolitos o piedras de Tonsil.
Aunque la mayoría de las personas sienten estas pequeñas bolas blancas en la parte posterior de la garganta que a menudo se desprenden en la boca, rara vez se habla de esta afección generalizada y el conocimiento sobre ellas es muy bajo. Muchos lo sufren en silencio creyendo que están solos o que no es más que algún residuo de la cena de la noche anterior. Pero sobretodo, si hay una razón por la que no se habla de estas piedrectas, es porque son repugnantes y malolientes.
Los tonsilolitos, también conocidos como piedras de la amígdala, son pequeñas gotas malolientes de moco, células muertas, desechos y bacterias que se forman en las criptas de las amígdalas, que son simplemente pequeños bolsillos o hendiduras que todos tenemos en las amígdalas. Cuando las células muertas atrapadas, la mucosidad y los desechos se endurecen o se calcifican, forman una bola blanca / amarillenta en los bolsillos de las amígdalas. Por lo general, aparecen como pequeños trozos en forma de coliflor y huelen como si pudieran despertar a tu difunta abuela.
¿Por qué apestan tanto?
El fuerte olor desagradable es causado por una acumulación de bacterias productoras de azufre que se alimenta de las piedras de las amígdalas recolectadas en las criptas de las amígdalas y es una combinación de sulfuro de hidrógeno, metil mercaptano y otras sustancias malolientes que se forman en él. Las piedras en las amígdalas pueden variar desde un tamaño de un grano de arroz hasta un tamaño bastante grande que causa molestias en la garganta y en algunos casos efectos secundarios incómodos, que incluyen dolor de garganta, dolor de oído y amigdalitis. También se cree que es una de las razones de la halitosis (mal aliento).
Tonsilolitos
Las piedras en las amígdalas son bastante comunes en adultos y niños. Sin embargo, tienden padecer de esta afección con mayor frecuencia las personas que sufren de inflamación crónica en las amígdalas o episodios repetidos de amigdalitis. Los estudios han demostrado que las personas a las que se les extirparon las amígdalas, en la mayoría de las circunstancias, es muy raro que generen cálculos en las amígdalas.
Existen algunos tratamientos efectivos para reducir la aparición de cálculos en las amígdalas. Quitarse las amígdalas es una opción, pero no la mejor solución, ya que las amígdalas desempeñan un papel en el sistema inmunitario y están destinadas a funcionar como redes, atrapando las bacterias y las partículas de virus que pasan por la garganta. Los tratamientos caseros fáciles como hacer gárgaras con agua salada o el enjuague bucal sin alcohol a menudo se recomiendan para deshacerse de los tonsilolitos. Un chorro de agua que emite potentes pulsos de agua también es una herramienta útil para limpiar las criptas de las amígdalas. La solución más simple es usar un bastoncillo de algodón o un cepillo de dientes para que pueda sacar estas piedrecitas tan desagradables y enjuagar la boca.